La diócesis de Ciudad Real vivió el inicio del Año Jubilar 2025 el pasado ddía 29 de ddiciembre con la procesión y misa de inauguración presididas por el obispo, Gerardo Melgar, en una jornada que dio inicio en una abarrotada iglesia de San Pedro, desde donde «comenzó el viaje» jubilar con más de un centenar de présbiteros llegados de toda la provincia hasta la Catedral de Santa María del Prado.
Cerca de 1.300 fieles se congregaron en este acto de fe junto a casi 100 sacerdotes de la diócesis. En la Catedral, el obispo destacó en su homilía el lema del Jubileo, 'Peregrinos de esperanza', convocado por el papa Francisco. Subrayó la necesidad de encarar este año para dar pasos en la renovación de esa esperanza que de sentido a la fe y a la vida en un momento de cambio en la sociedad que, dijo, ha perdido sus valores humanos. «Es una oportunidad para profundizar en la fe», advirtió Melgar, que habló del significado espiritual otorgado al Jubileo para «renovar nuestra relación con Dios» y «ayudar a renovar la esperanza que todos vemos como algo urgente». También invitó a tomar conciencia de que «estamos necesitados de Dios» y animó a los asistentes a recuperar esos valores perdidos.