Con muchísima ilusión y alegría hemos tenido los domingos 13 y 20 de septiembre cuatro celebraciones de Primeras Comuniones: 11 niños de los grupos de Yamimeth y Estefanía, 8 niños del grupo de Pepi, 6 del grupo de Fide y 9 de Luna.
Estaban programadas para el mes de mayo, pero las circunstancias por el confinamiento, han hecho que las celebremos ahora.
Todo ha estado muy bien organizado: el servicio de orden, el voro, las familias y catequistas.
Pedro Antonio, el párroco, ha insistido en las homilías en que igual que Jesús de Nazaret ejerce en nosotros su infinita misericordia, así tenemos que ejercerla con los demás. Además, las Primeras Comuniones de este año son especiales porque se celebran en la pandemia del Coronavirus, por lo que tenemos que llevar todos mascarillas de alegría, optimismo, ilusión, riéndonos de nosotros mismos para hacer la vida mejor a los demás. Nunca mascarillas de tristeza, idio, pesimismo. El segundo domingo, ha insistido en que Dios llama a cualquier hora del día, en cualquier monento de nuestra vida, haciendo referencia a la parábola de los trabajadores de la viña.
Damos gracias al Señor por los niños, familiares, catequistas, y pedimos por ellos.
Que sigan estando cerca de Jesús de Nazaret.